lunes, 12 de septiembre de 2011

 Tomas de mi mano, y por dentro lloro, aunque es falso el aire, siento que respiro, que bien mentís, a veces creo que es verdad todo lo que me das, llegue a imaginar que mi amor tu eres compatible con mi piel, pero son sueños escritos en un papel, mentís ya lo sé, me hago la desentendida porque  no puedo vivir sin tus mentiras ¿Ilógico no? Será mejor aceptar la derrota, las olas no son de magia, son de pura agua salada, lo peor es que es un absurda mentira ¡No me amas, no vos no me amas! Pero te hiciste indispensable para mí, pero bueno yo te busque, busque dolor y acá lo tengo aferrado a mi piel y a mi corazón, acá te tengo incorporado en mi ser, no importa voy a lavar toda mi ropa con tal de quitar tu dulce aroma impregnado en mi ropa, no eras la persona que sentí.
Total perder no es una derrota, el derrotado es el que no ha perdido nunca nada, por miedo a perderlo todo, ese pierde siempre. Lo que duele, acá en el corazón, es que me mentís, pareces una persona inigualable, dulce, poderosa porque fuiste el rey de mi reino, una persona tan linda y tierna, pero no, maldito descarado, sin escrúpulos, llore un rio entero por tus mentiras, hoy ya sin memoria para ti en mi mente, te digo “Mentías tan bien”

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